Tener un hijo es uno de los momentos más importantes en la vida de una familia y toda la energía está centrada en cuidar a ese bebé desde su nacimiento, pero ¿qué pasa durante el embarazo? En el marco del Día de la Obstetricia y de la Embarazada, que se celebra el 31 de agosto, la organización médica vittal comparte información y consejos para llevar una gestación sana y, de esta manera, evitar complicaciones para el niño y la futura mamá.
En primer lugar, hay que contemplar que no solamente la salud física incide en el normal desarrollo de un embarazo, sino también el bienestar psíquico y emocional. A continuación, la Dra. Cecilia Avancini, Jefa de Pediatría de vittal, detalla cuáles son las recomendaciones que debe seguir una mujer durante la etapa de gestación para sentirse bien, minimizar los riesgos en el parto y contribuir con la salud futura de su hijo/a:
Comé y bebé sano
Se sugiere llevar una dieta equilibrada y moderada, rica en ácido fólico, hierro y calcio, pero reducida en grasas. Además, se debe tener en cuenta que una mujer embarazada requiere solamente 300 calorías adicionales por día, por lo tanto, el mito de que hay que “comer por dos” es falso. Es igualmente esencial incorporar verduras, frutas, cereales, lácteos y legumbres, mientras que el aporte diario de proteínas de carne y pescado (no crudos) ayudará a que el bebé crezca sano y la mama no aumente de peso en exceso. Hay que beber la suficiente cantidad de agua (dos litros por día) y disminuir la ingesta de té, café y gaseosas. Alcohol, drogas y medicamentos que no hayan sido indicados por el médico están completamente contraindicados.
Tomá suplementos vitamínicos prenatales
El médico recomendará suplementos que contienen ácido fólico y hierro. Los primeros son necesarios para reducir el riesgo de malformaciones congénitas del tubo neural, como la espina bífida. Por otra parte, durante el embarazo aumenta el requerimiento de hierro en el organismo, sobre todo en el segundo y el tercer trimestre.
Hacé ejercicio
Hay ciertas actividades muy recomendadas para las embarazadas como caminar, practicar yoga, pilates, natación o ejercicio con pelotas gigantes. Sin excederse en esfuerzo, el ejercicio controlado beneficia a la mamá y al bebé durante el embarazo y ayudará a la mujer a recuperar más rápidamente su peso una vez que nazca el bebé.
No fumes
Fumar durante el embarazo aumenta el riesgo de un aborto espontáneo, retardo de crecimiento, desprendimiento de placenta y parto prematuro. A su vez, hay estudios que han encontrado una relación entre el fumar y un incremento en las probabilidades de tener un bebé con el labio leporino y el paladar hendido.
Asistí a todas las visitas médicas
Ir a todos los controles médicos y seguir las instrucciones del obstetra, quien indicará las pruebas prenatales correspondientes, es primordial. Asimismo, estos estudios aportarán tranquilidad y constituirán el acercamiento inicial al bebé, ya que con las ecografías tendremos sus primeras imágenes.
Usá ropa adecuada y mimá tu mente
Se recomienda el uso de calzado e indumentaria cómodos, sin descuidar el estilo al que está acostumbrada la futura mamá, dado que priorizar su autoestima contribuye al normal desarrollo del embarazo. Por su parte, buscar actividades que aporten tranquilidad y hacer ejercicios de relajación nos ayudará a sentirnos mejor, al igual que hacer actividades que nos gustan como ir al cine, leer o salir. Y un buen descanso durante el embarazo es muy importante, ya que el organismo está haciendo un sobreesfuerzo para aportarle al bebé todo lo necesario para desarrollarse.
Cuidá tu piel
En el embarazo se deben aplicar cremas solares protectoras para evitar la aparición de manchas, porque por acción de las hormonas, en esta etapa la piel sufre alteraciones como la hiperpigmentación. También hay que utilizar cremas antiestrías, que previenen la aparición de cicatrices como resultado del estiramiento de nuestra piel, con especial atención durante los meses finales, cuando la piel se estira a ritmo muy rápido.
Agendá una cita con el dentista
No hay que olvidarse de la higiene y la salud bucal: cepillá los dientes después de cada comida, usá hilo dental y visitá periódicamente al dentista. Los cambios hormonales en el embarazo pueden hacerte más susceptible a las enfermedades de las encías como la gingivitis y, a su vez, cada vez hay más evidencia de la correlación entre la gingivitis avanzada, o periodontitis, con el parto prematuro y los bebés de bajo peso al nacer.
Tomá clases de preparación al parto
Asistir a las clases de preparación al parto sirve para adquirir conocimientos y consciencia sobre los cambios en nuestro cuerpo, y conocer conceptos sobre las fases del parto, la higiene del bebé o la lactancia nos ayudarán a sentirnos más preparadas para lo que se avecina. En la medida de lo posible, es bueno compartir estas actividades en pareja.
Fuente: Vittal