Hoy es 8 de marzo, así que no quiero dejar de saludar a todas las mujeres en su día. Y hablando de ellas, hoy les comparto la receta de una que fue muy importante en mi vida: mi abuela. El fin del verano y la llegada del otoño coinciden con la época de los: los higos. Su temporada es tan breve, que hay que darse prisa para disfrutarlos; aunque pueden consumirse secos durante todo el año. Los higos han sido considerados desde tiempos remotos un alimento exquisito y sagrado, propio de divinidades. En esta época las higueras están en su mejor momento. Si los pajaritos no se nos adelantan a nuestra cosecha, nos dejan se pueden hacer varias confituras para guardar. Tradicionalmente, cuando el higo rezuma una gota de jugo de la pulpa por su parte inferior, se sabe que ya está maduro. Es lo que se conoce como la ´miel del higo´.
Los diabéticos tendrán que tener cuidado, porque se trata de una fruta con importantes cantidades de glucosa y fructosa. Su alto contenido en agua hace que su valor energético no sea muy elevado: 80 calorías por cada 100 gramos. Su alto aporte de fibra convierte al higo en el mejor regulador del tránsito intestinal. Tiene gran cantidad de hidratos de carbono y escasez de proteínas y grasas, por lo que es muy adecuada si hace deporte o una actividad física intensa. Como todas las frutas, son ricos en vitaminas y minerales. El calcio y el potasio predominan en su composición, así como la provitamina A, vitamina C y vitaminas del grupo B, como la B1 y B2.
INGREDIENTES
- 2 kgs. de higos maduros pero firmes
- 2 Lts. de agua
- 1 kg. de azúcar
- Cascarita de medio limón (ojo solo parte amarilla) para perfumar el almíbar
PREPARACIÓN
Lavar muy bien los higos bajo el chorro de agua fría. Colocar los higos en una olla grande tapados de agua y hervir hasta que suelten parte de la leche pegajosa, en la superficie del agua se formará espuma, son apenas unos minutos, en ese momento retirar con ayuda de una espumadera y reservar.
En otra olla grande y de fondo grueso poner los 2 litros de agua con el azúcar y la cascarita de limón, luego colocar los higos previamente pinchados varias veces con un escarbadientes. Cocinar a fuego fuerte por dos horas, debe quedar un almíbar espeso y los higos transparentes y bien impregnados de almíbar. Envasar los higos con el almíbar dentro de frascos esterilizados. Una buena opción para acompañarlos es con daditos de queso cremoso, de cabra queso crema o crema de leche semi batida pero sin azúcar.
Cuando hacemos cantidad colocarlos frascos bien tapados a hervir desde agua fría durante 20 minutos y guardar en la alacena, una vez abiertos siempre deben quedar en la heladera. Con los mismos cuidados podemos hacer mermelada para 1 Kg de fruta, 6oo cc. de agua, 1 clavo de olor, 1 cascarita de canela. Si guardan mis recetas, tienen la forma de proceder con la mermelada como ya presentamos en estas páginas. También pueden consultar en la red mi página "abuelaberta.com".
Berta Chudnobsky / berta@tizaymouse.com
La cocina de la abuela Berta: Higos en almíbar