1) TE DE BANANA: Se necesitan 4 cascaras de bananas. Hervirlas durante 3 min en 1 litro de agua (puede ser de lluvia), dejar enfriar y colar.Ahora ya tenemos 1 litro de té de banana concentrado listo para ser usado. Lo recomendable, es diluirlo en dos litros de agua, de forma que tendremos tres litros de abono de floración listos para ser usados. El concentrado también podes diluirlo en en un litro de agua, teniendo un litro y medio listo para ser usado. Lo que sobra, se puede guardar en la heladera por unos días sin problemas.
2) TE DE HUMUS DE LOMBRIZ: Para una maceta de 15 litros se necesita un bidón de 1 litro y medio, lleno de agua, agregarle 2 o 3 puñados de humus de lombriz o lumbricompuesto, batir bien y dejarlo a la sombra 2 días.
Hay que batirlo de vez en cuando para que se disuelva bien.Se puede regar con este abono cada 10 días, más o menos.
3) TE DE BANANA, ESPINACA Y AZÚCAR: El fertilizante casero lo hago con cáscaras de banana, espinaca y un poco de azúcar hervirlo. Dejarloenfriar . Licuarlo y ya queda listo para usarlo. Mezclar el licuado con dos litros de agua y colar. Es un fertilizante orgánico rico en potasio que estimula la floración.
FERTILIZANTES ORGÁNICOS PARA TODO MOMENTO: ideales para agregar a los otros tés como complemento.
1) TE DE CASCARA DE HUEVO: Guarda las cáscaras de los huevos. Remojarlas en bastante agua durante 24 horas. Retira luego las cáscaras, ponle unas gotitas de leche y riega las plantas con esta agua. Se pondrán preciosas. Aporta calcio.
Otra variante es dejar secar las cascaras (un golpe de calor del horno acelera el proceso) licuarlo (dicho de otra manera hacerlo polvo ) y agregar a las plantas una cucharadita por maceta.
2) HIERRO: Un pedazo de tejido de alambre dentro de la maceta aporta hierro.
3) TE DE COMPOST: En un balde vacío, llenar la tercera parte de compost. Remueve bien y deja que la mezcla se asiente varios días. Revolver la mezcla varias veces por día. Similar al de humus de lombriz.
5) TE DE ASPIRINA: Se puede tratar los hongos del suelo disolviendo una tableta de aspirinas en un litro de agua y regando con eso la zona afectada. No hagas la mezcla muy fuerte porque podría quemar las hojas de las plantas regadas.
También puedes mezclar aspirinas con tu abono regular, para prevenir la formación de hongos en las raíces de plantas nuevas.
7) TE DE AGUA OXIGENADA: Pesticida: Mezcle una parte de peróxido de hidrógeno al 35%, sin aditivos, con diez partes de agua. Aplique la solución al suelo en torno a las plantas, eliminará las larvas de ácaros y pulgones así como hongos y nematodos. El peróxido de hidrógeno se degrada rápidamente y la planta y sus frutos no tendrán restos de agua oxigenada. Para tratar y prevenir las plagas de la planta pulverizaremos ésta con una solución a partes iguales de peróxido de hidrógeno al 3% y agua destilada.
Prevención de la podredumbre: Tiene el agua oxigenada otro uso interesante, para aportar oxígeno a la tierra. Tras lluvias intensas o en suelos muy arcillosos se pueden producir encharcamientos que si superan las 24 horas ya pueden dañar las raíces de las plantas por la falta de oxígeno. Regar con una solución diluida de agua oxigenada puede salvar esos cultivos por el aporte de oxígeno que produce.
Tratamiento del agua: En zonas urbanas el agua dela canilla es clorada, por lo tanto no es la mejor para las plantas. Una forma de liberar al agua del grifo del cloro y demás productos químicos que pueda llevar disueltos es añadiéndole 20 ml por cada 5 litros de agua.
Es un producto, el agua oxigenada, que puede dar mucho juego en jardinería. Lo único a tener en cuenta es que como todo hay que usarlo cuando se precise, pues un uso exagerado también eliminará los microorganismos beneficiosos para las plantas que se encuentran en la tierra.
8) ABONO DE YERBA, CAFE O TÉ
El reciclando de las bolsitas o saquitos de té, mate cocido, yerba y la borra del café.
Los restos de té, yerba o café pueden ser incorporados directamente a las macetas, mezclados directamente con la tierra. Es un excelente fertilizante para plantas que prefieren un sustrato ácido, como Rosales y Azaleas, y nos ahorraremos de comprar turba para abonarlas.
Con las bolsitas de té vacías o los filtros de café podemos tapar los agujeros de las macetas, para evitar perder tierra cuando se riega en exceso. Así sólo pasa el agua filtrada y no se pierde sustrato.
El café molido y la yerba es otro desecho de la cocina que podemos usar como abono casero para plantas sin necesidad de pasar por un proceso previo (como el compostaje). El café usado tiene bajos niveles de nitrógeno, magnesio, potasio y sales que son un excelente fertilizante para las plantas que necesitan un sustrato ácido como azaleas, frutillas, rosas y hortensias, ya que libera estos nutrientes de manera gradual.
El Jardín que se Come por Cristina Blotta