Publicado Por:El miércoles pasado estuve hablando con mi hija sobre tener bien clara nuestra escala de VALORES y en la tranquilidad que nos da actuar de forma coherente con ella, y hoy justo veo un video muy interesante de Brian Tracy sobre el tema, referido a tener los OBJETIVOS y los VALORES en ARMONÍA para ser una persona de éxito, y aunque él habla de la vida profesional, yo creo que es el éxito en todos los órdenes de la vida, ya que los valores son convicciones profundas que tenemos los seres humanos, que determinan nuestra manera de ser y orientan nuestra conducta.
Según Tracy, las personas de éxito lo son porque tienen bien en claro quiénes son, cuáles son sus valores, en qué creen y por qué luchan; la gente a la que no le va bien, es porque es insegura y confusa al respecto, y la gente a la que le va mal es porque no piensa ni tiene valores reales que lo guíen en absoluto.
La clarificación de los valores, las virtudes y las ideas, es el primer paso para construír una autoestima alta, una fuerte confianza en uno mismo y una personalidad de carácter. Cuando nos tomamos el tiempo para pensar sobre nuestros valores fundamentales y luego nos comprometemos con nosotros mismos para vivir una vida consistente con ellos, ahí surge la fuerza mental y el bienestar. Nos sentimos más fuertes y más capaces. Nos sentimos centrados con el universo y competentes para lograr los objetivos que nos propusimos. Sabemos para qué estamos y para qué no, sabemos en qué que creemos y en qué orden de importancia.
Mucho del estrés e incomodidad en la vida vienen cuando nos desviamos de nuestros valores, de lo que sabemos que es bueno y verdadero en lo profundo de nuestro ser. Cuando creemos profundamente en una cosa y hacemos otra que no es congruente con nuestros valores. En cambio, cuando estos están alineados con nuestros objetivos, tenemos una maravillosa sensación de calma, confianza y poder personal. Mucha gente se siente desmotivada con su empleo o el trabajo que hace, y cuando puede cambiar al trabajo correcto, vuelven a la vida llenos de entusiasmo y más felices. Eso ocurre porque el mundo exterior se hace congruente con el mundo interior.
Para ponerte en acción, Tracy sugiere este ejercicio: Primero, tomate un tiempo para aclarar tus valores y creencias. Asegurate que todo lo que hacés en el mundo exterior esté en armonía con lo que creés que es correcto y está bien en tu mundo interior. Pensá qué te hace realmente feliz, y luego procurá organizar tu vida en función de eso. Escribí tus VALORES y cada uno de tus OBJETIVOS en un papel, luego escribí abajo tres pasos que podrías dar inmediatamente para comenzar a moverte hacia el logro de cada uno de ellos. Y ponete en marcha ya!
¡Siempre por tu bienestar!
¿Tus objetivos y tus valores están en armonía?
