Publicado Por:La decisión tiene sentido a nivel estratégico dado que Facebook compró Facebook hace dos años, pero también podría generar suspicacias sobre la forma en la que Facebook utilizará dicha información. El gigante de las redes sociales tendrá ahora más datos sobre nosotros, algo que podría no gustar a quienes ven cada vez más amenazada su privacidad.
Facebook sabrá tu número de teléfono
Aunque muchos usuarios de Facebook ya comparten su teléfono e incluso su dirección en su perfil en esta red social otros prefieren no hacerlo para tener parte de su vida personal separada de su actividad en esta red social.
Al compartir nuestro número de teléfono con Facebook, la red social usará dicha información "para mejorar tu experiencia con la publicidad y los productos en Facebook. Por favor lee más información acerca de cómo y cuándo puedes tomar esta decisión". En el anuncio también indican cómo habrá un mayor seguimiento de nuestra actividad en WhatsApp con motivo de ese cambio en la política de privacidad.
Esa conexión entre ambos servicios hará que con esa información sobre nuestro número, con quién hablamos y quiénes son nuestros contactos nos sugerirán entre otras cosas nuevos amigos en Facebook. Aunque como apuntamos más adelante el cifrado se mantiene, Facebook recolectará información a través de WhatsApp que permitirá mostrarnos sugerencias personalizadas tanto en el ámbito de los contactos como en el de la publicidad.
30 días para actuar
En la sección de preguntas sobre los nuevos términos de servicio y política de privacidad aparece un apartado en el que se explica cómo la conexión entre ambos servicios es útil para ofrecer una mejor experiencia de usuario, pero señalan que "Nada de lo que compartas en WhatsApp, incluyendo tus mensajes, fotos, e información de perfil, será compartido en Facebook o en alguna de las aplicaciones filiales de Facebook para que otros los vean".
Así pues, aunque cosas como tu número de teléfono sean compartidos con Facebook, esa información no será vista por otros usuarios de Facebook, y en todo momento el cifrado extremo a extremo se mantiene: ni WhatsApp ni Facebook podrán leerlos.
WhatsApp da no obstante la opción de que la información de tu cuenta de WhatsApp no sea compartida con Facebook, algo que cualquiera puede hacer durante los primeros 30 días. Puedes hacerlo de dos formas: antes de presionar Aceptar para dar el consentimiento a los nuevos términos podemos pinchar en la palabra "Lee" marcada en azul, lo que hará que aparezca una casilla que podemos desactivar.
Si no hemos hecho eso podremos desactivar esa compartición del teléfono con Facebook con un segundo método. Para ello primero habrá que aceptar los nuevos Términos de Servicio y Política de Privacidad actualizados, tras lo cual habrá que dirigirse a Ajustes -> Cuenta -> Compartir la información de mi cuenta: será allí donde tendremos que desactivar esa opción. Aún haciendo eso, apuntan en WhatsApp, habrá datos que sí se compartirán con Facebook sin que podamos hacer nada.
Recorda que en ambos casos esa desactivación de la opción de compartir datos con Facebook de forma voluntaria solo se podrá ejecutar en los 30 días siguientes a la aceptación de los nuevos términos de servicio y política de privacidad actualizados.
El debate sobre la privacidad
Esta decisión de WhatsApp vuelve a poner de manifiesto el delicado equilibrio que mantenemos en nuestra actividad en internet. Redes sociales como Facebook y servicios como WhatsApp recolectan información, pero desde luego no son los únicos, y en el pasado reciente hemos visto críticas muy fuertes a la actitud de Microsoft con Windows 10, sin poder evitar mencionar a Google, una empresa que realiza esa recolección de datos de forma continua y que por culpa de ello está siendo investigada en la Unión Europea.
El problema vuelve a ser el mismo de siempre: el usuario final no suele tener la pelota en su tejado, y usar esos servicios -a menudo gratuitos- implica ese famoso "si no pagas por el producto, tú eres el producto". Usar las ventajas de WhatsApp, Facebook y todo tipo de servicios de empresas tecnológicas -y no tecnológicas- implica cada vez más ceder parte de nuestra privacidad con la manida excusa de "mejorar la experiencia de usuario".
Puede que en efecto recolectar ciertos datos ayude en esa experiencia, pero esa voracidad con la que las empresas quieren recolectar más y más información sobre nosotros es realmente preocupante. La nueva política de privacidad de WhatsApp no ayuda a que nos tranquilicemos, desde luego, y puede que eso haga que otros consideren -una vez más- alternativas a una aplicación de mensajería que se beneficia de su absoluto dominio en mercados como el español.
