"Nuestro país depende mucho del estado del tiempo y las actividades económicas tienen mucho que ver" --Martínez
Tiene 32 años de profesión y hace 30 que trabaja en el Servicio Meteorológico Nacional. Actualmente está en la oficina de pronósticos del aeropuerto de San Fernando y hace pronósticos para la aviación. "Como una especie de hobbie escribo EL TIEMPO en La Auténtica Defensa y en Facebook. Trato de evacuar todas las consultas que me hagan los medios y a la gente en general sobre el tiempo. Lo hago con mucho gusto porque es algo que me da mucho placer", cuenta el responsable del pronóstico para nuestra ciudad que día a día se publica en la página 2.
El 24 de octubre de 1871, siendo presidente Domingo Faustino Sarmiento, se inauguró en Córdoba, el primer Observatorio Astronómico de la Argentina y de América del Sur. Su primer director fue el estadounidense Benjamín Arthorp Gould, quien en 1870 se había radicado en Argentina, ante una invitación especial de Sarmiento. "Esa cuestión era realmente interesante en ese momento por eso trajo gente del exterior. El primer director fue un ingeniero norteamericano quien dio el puntapié inicial para que se generara una institución que ha crecido en el tiempo y se mantiene durante estos 144 años", detalla Martínez.
"El factor tiempo es fundamental. No sólo depende del tiempo si la cosecha va a ser buena o mala sino que también los precios que va a tener el grano, las bolsas de cereales se rigen por los cambios climáticos, si hay un pronóstico malo sube el precio. Si hay un pronóstico bueno empieza a bajar. Nuestro país depende mucho del estado del tiempo y las actividades económicas tienen mucho que ver", reconoce el meteorólogo.
"Los pronósticos generales tienen su trascendencia y se difunden por todos los medios. A muchos le da indiferencia, le da lo mismo que este lloviendo, que haya sol, que haga frío o calor pero en el fondo todos tenemos un poquito de curiosidad y vemos qué está pasando en el cielo. De alguna manera nos incide. Ya sea porque nos arruinó el asado, si nos canceló un plan, o porque nos mojamos con la lluvia o tuvimos frío y no nos abrigamos lo suficiente. Siempre un servicio público, como el que brinda el servicio meteorológico nacional de alertar sobre fenómenos severos, de decirle a la gente o darle una idea de lo que va a pasar me parece algo importante para la vida cotidiana. También me parece bien para la economía del país", agrega Martínez.
"Últimamente hay una especie de ida y vuelta, porque me parece que la gente necesita de un servicio del tiempo, algunos más, otros menos pero a todos les interesa. Los meteorólogos tenemos que brindar un servicio bueno, si yo te digo va a llover y después hay sol o al revés voy perdiendo credibilidad, entonces mis servicios tienen que ser buenos y creíbles. Le doy mucha importancia a los pronósticos locales, yo escribo para Campana. Me parece que si los pronósticos tienen un grado de acierto es porque me centro en esta ciudad y no estoy hablando en general en lo que va a pasar por ejemplo en La Pampa húmeda. Es más fácil de acertar el pronóstico y es visto bien por la gente. Los pronósticos locales son muy interesantes, muy importantes y eso la gente lo valora", afirma el campanense.
El servicio meteorológico cuenta con estaciones meteorológicas desde La Quiaca hasta la base Belgrano II en la Antártida: "Son 130 estaciones repartidas en todo el país. La tarea que cumple es reconocida no solamente aquí sino que en el exterior", remarca.
Cuando se le pregunta sobre la naturaleza y el cambio climático, Martínez comenta: "Los ríos crecen en función de la lluvia, esta es quien alimenta al río. Se da en zonas nacientes. Nosotros tenemos un sistema fluvial muy extenso, en la cuenca del Río de la Plata que nace en Brasil. Cuando llueve mucho evidentemente ese caudal de agua es causado por los ríos, se traslada hacia el océano y en su camino si el caudal de agua es mucho causa inundaciones. Hay una relación muy directa entre el clima y lo que pasa con los ríos".
Finalmente, Martínez hace un balance de su experiencia personal en el Servicio Meteorológico Nacional: "He tenido grandes satisfacciones con mi trabajo. Me ha permitido recorrer el país y también pude conocer la Antártida, he estado varias veces allí ejerciendo mi profesión. No es una profesión que me haya rendido mucho económicamente, pero sí desde el punto de vista de la vocación estoy completamente satisfecho con lo que me ha tocado. Ojala tenga algunos años más de profesión".