La falta de planificación, la falta de tiempo y otros factores como el miedo al dentista (una variante del miedo al médico) hacen que muchas personas no vayan regularmente y acaben citándose cuando tienen síntomas.
Frecuencia recomendable para los adultos
Como decía, normalmente un adulto debería ir una vez al año a visitar a su dentista. El proceso de desarrollo de caries o sarro es relativamente lento si se tiene una higiene de vida razonable (lavarse los dientes tras las comidas, no comer muchos dulces, no fumar, no beber alcohol), por lo que un control cada 12 meses permite anticipar los problemas y mantener sanos boca y dientes.
Sin embargo, para algunas personas con patologías previas o malos hábitos, es posible que sea necesaria una frecuencia mayor, que suele ser de dos veces al año. Es el caso de las personas que sufren de periodontitis o gengivitis, que suelen necesitar una limpieza cada 6 meses.
Ventajas de la prevención
Como es habitual en los temas de salud, una buena prevención tiene muchos beneficios. En el caso de los dientes, las ventajas son diversas. En primer lugar, existe una ventaja económica, ya que el precio de una visita de control o de una limpieza suele ser muy barato, mientras tratar a una carie avanzada puede llegar a costar mucho dinero.
Pero también hay que tomar en cuenta otro factor. Como bien explica la Organización Mundial de la Salud, las dolencias bucodentales comparten factores de riesgo con las cuatro enfermedades crónicas más importantes -enfermedades cardiovasculares, cáncer, enfermedades respiratorias crónicas y diabetes- pues se ven favorecidas por las dietas malsanas, el tabaquismo y el consumo nocivo de alcohol. Pero no solo comparten las causas, sino que a menudo una mala salud bucal es un síntoma de la existencia de una enfermedad cardiovascular, de un cáncer o de diabetes. Por lo tanto, visitar el dentista puede permitir detectar enfermedades graves.
Más argumentos para hacer esa visita
Ya no tienes porque tener miedo a ir al dentista. Las técnicas han evolucionado y los profesionales se preocupan de que sus pacientes no sufran ningún dolor.
Con el fenómeno de los cupones, puedes encontrar muy buenas ofertas para una limpieza dental o una visita de control. Claro que los establecimientos lo hacen porque saben que se encontrarán un cierto porcentaje de pacientes con patologías que tratar, pero de todos modos es bueno porque si llevas tiempo sin ir, tendrás acceso a un control y a un diagnóstico.
Creo que la mayoría de las personas saben que la frecuencia generalmente recomendada para hacer una visita de control en el dentista es anual.