Científicos de la Universidad de Granada, en España, desarrollaron una nueva técnica sencilla y no invasiva que permite detectar con un pinchazo en el dedo si un niño de entre dos y cuatro años es celíaco sin necesidad de realizar una extracción de sangre.
Según informó la Universidad de Granada, este sistema no precisa personal experimentado, es rápido y económico. Su autora, Vega Almazán, investigadora del departamento de pediatría de la institución, explica que la idea de realizar este trabajo surgió para tratar de responder a la pregunta de “qué prevalencia oculta o silente existe de la enfermedad celíaca”.
“Basta con una punción en el pulpejo del dedo del niño para extraer una gotita de sangre que se depositará en el dispositivo y en caso de que el sujeto padezca la enfermedad, aparecerá una línea color rosada, similar a la de los test de embarazo, lo que significará que en su sangre existen esos autoanticuerpos”, explica Almazán.
Este estudio permitió detectar a seis niños celíacos de 198 estudiados, lo que supone una prevalencia muy elevada de un tres por ciento, superior a la media europea.
La enfermedad celíaca silente es aquella que pasa inadvertida a ojos del médico por reunir síntomas menores imperceptibles hasta por el propio paciente. La celiaquía es una enfermedad sistémica causada por una intolerancia permanente al gluten (contenido en el trigo, cebada y centeno) y afecta a personas con susceptibilidad genética. Se manifiesta mediante síntomas intestinales y extradigestivos, como dolores articulares, abdominales, dermatitis y cefalea, entre tantos otros.
Actualmente, para diagnosticar la enfermedad celíaca es necesaria la combinación de una sintomatología clínica, un estudio en sangre de anticuerpos de enfermedad celíaca positivos y un estudio histológico compatible mediante biopsia intestinal.
Este estudio permitió detectar a seis niños celíacos de 198 estudiados, lo que supone una prevalencia muy elevada de un 3%, superior a la media europea.